Como
menciono en otros posts la sobreoperación era mi gran punto débil. Me
consideraba técnicamente bueno, pero el ansia por demostrarme a mí mismo que
era capaz de hacerlo bien casi cada día, que era capaz de ganarme la vida con
el trading, que nunca iba a fallar, era algo que me hacía precipitarme y ver
más oportunidades de abrir operaciones de las que realmente había.
Recuerdo
como tras algunas horas, y a veces solamente unos pocos minutos frente a los
gráficos, había una poderosa fuerza que me empujaba a abrir operaciones, cuando
ninguna de las señales que yo tenía bien definidas se había generado. Es algo
realmente curioso el proceso mental que te hace “pasar olímpicamente”, sin
darte cuenta, de las reglas que tienes escritas a un palmo de tus narices”.
Cualquier excusa es buena. Sobre todo si es una excusa sofisticada e inteligente, que te convence de que no estás enganchado al trading, sino que sobreoperas debido a que tienes que operar para ganarte la vida. Pero los motivos eran otros.
Cualquier excusa es buena. Sobre todo si es una excusa sofisticada e inteligente, que te convence de que no estás enganchado al trading, sino que sobreoperas debido a que tienes que operar para ganarte la vida. Pero los motivos eran otros.
Está
demostrado, y bien demostrado, que para ganarte la vida con el swing trading o
con el intradía, ni es necesario estar constantemente dentro del mercado, ni es
necesario un gran volumen de operaciones. Yo mismo me establecí un objetivo
semanal de pips a ganar, y os aseguro que si hacéis ese ejercicio os daréis
cuenta de que unos pocos pips bastan para llevar una vida holgada, aunque tu
cuenta sea reducida.
Tengo
la virtud positiva como trader de no haber tenido ninguna gran pérdida (hasta
ahora), y sin embargo, por no haber cerrado la pantalla cuando mis reglas así
me hubiesen obligado he acumulado pérdidas que semanas adelante pasaban
factura, puesto que después es muy duro recuperarte. Días y días de pequeñas
pérdidas por mi gran debilidad: la sobreoperación.
Inquieto
por el consejo que da Alexander Elder de acudir a alcohólicos anónimos (AAAA)
decidí acercarme a una reunión abierta que tenía lugar los terceros jueves de
cada mes. No quería llevar ninguna idea preconcebida sino solamente ir dispuesto
a escuchar.
Mis conclusiones fueron las siguientes:
Objetivo
único: pasar sobrio las próximas 24 horas. Eso suponía ganar una batalla de
una guerra que puede durar toda la vida. Al día siguiente ya se vería. Por lo
tanto, y debido a la dificultad que conlleva no beber ni una sola gota de
alcohol para un alcohólico, el objetivo era tremendamente cortoplacista. Mañana
ya se vería…pero si hoy me acuesto sobrio he vencido.
Escuchar
y ver a personas absolutamente normales de aspecto y expresión, en un ejercicio
de abrumadora humildad, reconocer no poder ellos solos con ese problema, con la
enfermedad del alcoholismo, te hace pensar en el montón de facetas de la vida
que las personas no somos capaces de superar por no procurarnos ayuda.
Dejar
de fumar de raíz, ponernos a estudiar día tras día con continuidad, seguir una
dieta, ir a un gimnasio con continuidad. No lograrnos ayuda, trabajando la
dificultad en equipo, o establecer metas demasiado ambiciosas y lejanas en el
tiempo son cuestiones que no ayudan.
Alexander
Elder establecía la relación “perder” con “bebida”. Yo sin embargo pienso que
habría que asociar el “llevar a cabo la primera sobreoperación, es decir, incumplir
una sola vez mis reglas en una jornada
de trading” con “primera copa”. Para mí, sobreoperar una sola vez, la primera,
equivalía a los alcohólicos a su primera copa. Después de esta se pierde parte o
todo el control, y las consecuencias son desastrosas.
A mí
me había sucedido lo mismo en muchas jornadas de trading. Una operación abierta
saltándome mis reglas, es decir, abrir sin que se genere una señal, para
después seguirle un rosario de operaciones abiertas con poco criterio, sin
atender claramente a reglas definidas, y con los consiguientes stops barridos.
Pérdidas y más pérdidas. No grandes pérdidas, pero si las que debieran
corresponder a varios días. Y sobre todo, bajada de autoestima y sensación de
no tener el control y de incapacidad para el trading. Un derrumbe moral en toda
regla.
Así
que asocié “primera copa”, que es la que te emborracha, ya que les hace perder
el control, a “primera operación saltándome mi sistema de trading”, porque es
la que me ofusca, me aturde, me genera sensaciones negativas, me lleva a
cometer más errores, y en definitiva me emborracha.
Comprendí, al igual que ellos con el
alcohol, que yo no era capaz de lograr eso sólo. Yo tenía otras
virtudes y otras capacidades, pero la sobreoperación era necesario vencerla con
ayuda. Y eso hice acudiendo a estas reuniones. Allí asimilé que no podía beber ni una gota de alcohol, es decir, no
podía saltarme mis reglas ni una sola vez. Ni una. Porque esa una era la que
llevaba a las pérdidas.
Creo
que lo inteligente es vencer buscando la victoria. Sin embargo, encuentro
estúpido y soberbio perder por poco, poniendo como excusa que lo has todo por
ti mismo. Muy bien…has perdido tu solo. Pues toda la derrota para ti. Yo elegí
ayudarme para superar esa debilidad, que no sabía si mantendría siempre en el
tiempo, o era posible reorientar.
Ahora
pienso que con saltarme una sola vez mis reglas de trading he fracasado. Por
abrir una sola operación sin que esta atienda a lo que yo previamente he
establecido con niveles, señales y forma de abrir una posición, me estaré
comenzando a emborrachar, y seré un borracho. Un borracho incapaz de vencer al
esfuerzo de no sobreoperar durante un solo día. Al día siguiente ya se verá…
Ejercicios propuestos:
Os
propongo ir a alcohólicos anónimos durante 2 meses, 1 día a la semana. Al día
siguiente de la reunión os pensaréis muy mucho abrir una operación saltándoos
las normas. Apreciaréis lo duro que resulta, pero notaréis el progreso que se
obtiene jurándoos día tras día, que no vais a sobreoperar en esa sesión, porque
esa será vuestra única meta. Al día
siguiente ya se verá.
Os
felicitaréis por haberos ayudado compartiendo experiencias de otras personas
que también creían que la primera la podían evitar por sí mismos. Pero no era
así.
Os daréis cuenta de cómo estar sobrio,
no sobreoperar, tener ganancias en una sesión, o tener pérdidas, está separado
por una delgada línea, en la que la única diferencia es no abrir sin reglas o
abrir con reglas, beber la primera copa o no beberla.
Muy buen artículo. En muchas ocasiones me he sentido igual. Creo que tengo las bases técnicas para encontrar buenas operaciones, pero cuando abres una operación (además te das cuenta en seguida) que no cumple tus normas, o con bajas probabilidades de éxito y que, como era de esperar, va en tu contra, el resto del día es una metedura de pata tras otra y al final del día te preguntas si estás hecho para esto, si realmente eres lo suficientemente bueno o estas construyendo castillos en el aire...
ResponderEliminarUn saludo.
gracias Miguel. He leído algunos de los análisis técnicos que publicas a menudo y me parecen muy buenos. La cuestión es que a veces los traders o aspirantes a traders volvemos malo un buen trabajo hecho previamente. Suerte.
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